La Bodega de Quintín, hotel, restaurante, jardines, bodega del siglo XVIII, es un espacio incomparable donde reunirse con familiares, seres queridos o colegas, ya sea para la celebración de románticas bodas de verano o invierno, memorables primeras comuniones, bautizos o eventos corporativos; a solo 48kms de Madrid.

Si buscas celebrar un evento de verano, sus magníficos jardines se convertirán en un elemento imprescindible, y si por el contrario, buscas dónde preparar una celebración en invierno, la calidad de su comida, espacios e instalaciones no te dejarán indiferente.

La Bodega de Quintín es fruto del trabajo de un gran equipo, que implicado en este proyecto rinde homenaje al abuelo Quintín, un carismático viticultor de la zona, y última generación de la familia García que trabajó en las bodegas situadas bajo el hotel.

Actualmente, es Irene García, nieta de Quintín, quien continúa ese legado. Irene es una joven emprendedora, tercera generación de esta familia dedicada desde hace años a la cultura vitivinícola, que ha pausado por el momento su carrera profesional para seguir adelante con este nuevo reto.

Irene ha convertido las bodegas del siglo XVIII, en las que trabajaba su abuelo Quintín, en un hotel rural único, acogedor y cargado de valor sentimental, artístico y patrimonial.

La Bodega de Quintín ofrece hoy en día un auténtico viaje al pasado. Permite descubrir la tradición y la esencia rural de hace más de 300 años.